MUJERES MIGRANTES +EMPODERAMIENTO                                                  -DESIGUALDADES En su informe sobre el trabajo doméstico, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) define el trabajo doméstico como trabajo en el ámbito privado con tareas como cocinar, limpiar, lavar y cuidar los niños, los ancianos, los enfermos y los discapacitados; y son una fuente importante de empleo femenino.  Este organismo señala que con frecuencia las trabajadoras domésticas reciben salarios muy bajos, tienen jornadas de trabajo muy largas, suelen no tener garantizado un día de descanso semanal y, algunas veces, están expuestos a abusos físicos, mentales y sexuales o a restricciones de la libertad de movimiento. Y a su vez quienes ejercen este tipo de trabajo en su mayoria son mujeres migrantes que por muchas variables o circunstancias han normalizado dicha situacion de precariedad, en un entorno laboral vulnerable de derechos.  Diversas investigaciones